Santo Domingo.- La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) resolvió 131 averías, realizó 11,852 intervenciones a la red de alcantarillado sanitario, hizo diez desobstrucciones en redes y dejó un total de 10 válvulas trabajadas en la semana que finaliza, a fin de mejorar el servicio que brida a la ciudadanía en materia de agua potable y alcantarillado.
El director general de la CAASD, ingeniero Felipe Suberví, precisó que las brigadas de la institución llevaron soluciones en materia de averías en redes a sectores ubicados en el municipio Los Alcarrizos, así como al ensanche La Fe, residenciales en la avenida República de Colombia, Atala, El Pedregal, Las Praderas, Alma Rosa I, Isabelita, Guaricano, entre muchos otros más.
Sobre la producción de agua potable, Suberví indicó que se encuentra en los 406 millones de galones por día. “Todavía nos falta por alcanzar 14 millones de galones diarios más, porque en condiciones normales la CAASD produce unos 420 millones de galones y estamos trabajando para que así sea”, refirió.
Aun así, el servicio se está brindando con normalidad en todo el Gran Santo Domingo, salvo en los sectores que históricamente han tenido alguna deficiencia, debido a que su infraestructura de agua potable y alcantarillado sanitario ha sido colocada de manera informal, incluso por los mismos comunitarios, y son los sectores ubicados en el cordón que bordea el Distrito Nacional y la provincia. “Nuestro objetivo es darles soluciones y para eso estamos trabajando arduamente”, puntualizó.
“Después del paso por nuestro territorio de la tormenta tropical Laura, todos nuestros acueductos están operando a plena capacidad. Estos son: el acueducto Valdesia Santo Domingo, los sistemas Duey, Isa Mana, Barrera de Salinidad, los campos de pozos de Santo Domingo Este, como La Joya y Los Marenos, y en el norte, Sabana Perdida y Guaricano San Felipe”, agregó el ingeniero Suberví.
“De los daños ocasionados por la tormenta Laura sólo nos queda recuperar dos motores quemados que tenemos, uno en el campo de pozos Guaricano y otro en el campo de pozos de Sabana Perdida. Como buena noticia de las tormentas Laura e Isaías debemos resaltar la recuperación que han tenido los embalses de las presas de Jigüey y Valdesia”, prosiguió.
Suberví dijo que la presa de Jigüey está la cota 535.38, de una máxima de 541.50. Aún le restan 6.12 metros para alcanzar su nivel máximo, que es un vertedero libre.
La presa de Valdesia, cuya cota máxima es la 150, se encuentra en la cota 147.77. “A partir de este nivel, si siguiera lloviendo en esta época, no podemos dejarla subir más de ahí, porque es una exigencia del manual de operación de presas en condiciones de temporada ciclónica. Si las lluvias apuntaran a aumentar este nivel sería necesario operar la puerta de desagüe para impedir que siguiera subiendo”, aclaró.
El caudal del río Nizao aún está en los 15.44 metros cúbicos por segundo (m³/seg), ligeramente menor al caudal de salida del complejo Nizao Valdesia, que actualmente ronda los 20 m³/seg para agua potable, riego agrícola y, además, para la producción de energía.
“Nuestras brigadas continúan trabajando y nuestro personal sigue activo las 24 horas del día, a fin de que todos nuestros acueductos sigan operando en condiciones normales, salvo algunas eventualidades que tenemos por interrupción del servicio de energía eléctrica”, sostuvo.
“Sabemos que la tormenta afectó mucho el tendido eléctrico y, por labores de mantenimiento de circuitos de alta tensión de las compañías Edeeste y Edesur, se producen algunas salidas esporádicas de nuestros sistemas, pero han sido cortas”, prosiguió.
El ingeniero Felipe Suberví resaltó la necesidad de que la población use con prudencia y racionalidad el agua potable que recibe.
“Este llamado al uso racional del preciado líquido cobra fuerza en este y en todo momento, debido a que es un compromiso de todos nosotros como ciudadanos, con la salud, los demás y con el planeta. Cuidemos el agua en época de abundancia de lluvias y también cuando llegue la sequía”, concluyó.